UN RINCÓN ESPECIAL

Extrañando mi niñez, cuando la fragilidad de tus emociones no se cohibe y te permite gozar de los pequeños detalles, cuando tu complexión física, limitada estatura e inocentes ojos te hacían sentir un poquito menos vulnerable que ahora; Cuando tal vez lo único que te causaba miedo era el ruido de un trueno, la obscuridad, las historias de terror, el fantasma que habítaba tu closet, el señor que te seguía al atardecer o dormir sola.

Era entonces cuando recurría a ese lugar seguro, tranquilo y cálido, lleno de fantasías y escudos imaginarios, en donde se esfumaban los fantasmas y brujas, donde los truenos callaban y la obscuridad sedesvanecía por completo...Creo que muchas cosas no cambian y siguen siendo las mismas. Pues aunque ahora comprenda que los truenos no son mas que una manifestación de la lluvia, que en la obscuridad es mejor, que el proposito de la historia de terror es precisamente causar miedo, que el fantasma que habitaba mi closet se mudo por no hacerle caso, que el señor que me seguía al atardecer no era mas que mi sombra y que si duermo sola es mas concha. Sigo teniendo miedos, sigo sintiendome insegura tal vez por cosas totalmente diferentes, a cuando se es pequeño.

Lo cierto es que esa sensación de estar a salvo puede ser la misma de un lugar seguro, tranquilo y cálido, lleno de fantasías y escudos imaginarios, en donde tal vez los problemas no se esfuman por completo, ni el sentimiento calle o se desvanezca, pero tienes la certeza de que alguien te escucha y sepone un rato en tus zapatos por muy chicos que le puedan quedar...